29 Mar Defiende Venezuela expresa su preocupación sobre la necesidad que se respeten las obligaciones en materia de Derechos Humanos
El 13 de marzo de 2020, Venezuela se convirtió en el último país de América Latina en reportar la llegada del coronavirus a su territorio.
Con 33 casos confirmados hasta el martes 17 de marzo, la Organización Panamericana de la Salud sitúa a Venezuela en la lista de países en alto riesgo por la emergencia humanitaria compleja que atraviesa, por lo que el manejo de la pandemia representa un enorme desafío con grandes consecuencias sanitarias y económicas.
Ante esta situación, la organización Defiende Venezuela expresa su preocupación sobre la necesidad que se respeten las obligaciones en materia de Derechos Humanos para la prevención, preparación, contención y tratamiento del COVID-19, así como en el marco de todas las medidas estatales que sean implementadas para tales fines.
En este sentido, instan a las autoridades venezolanas a tener un respeto hacia la dignidad humana, brindando especial protección a los grupos vulnerables, garantizando transparencia en la toma de decisiones y debido acceso a la información; asimismo, se deben evitar arbitrariedades a cargo de los órganos de seguridad del Estado, en particular de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana y el FAES. Solo de esa forma, se puede garantizar plenamente la salud y el bienestar de la población.
Adicionalmente, denuncian el desconocimiento de las competencias constitucionales de la Asamblea Nacional órgano al que se le reconoce- en el Artículo 399 de la Constitución- el deber que les sea presentado el decreto de declaración de estado de excepción para la consideración de su aprobación.
Rechazan el control de la Fuerza Armada Nacional frente a la pandemia del COVID-19 recordando que en esta situación el ente de seguridad debe estar subordinado a las autoridades civiles, convirtiéndose en un organismo de apoyo para priorizar la toma de decisiones desde los criterios técnicos, científicos y sanitarios, por lo que se exige que la vocería pública para el anuncio de las medidas debe estar encabezada por las autoridades sanitarias.
En Venezuela, el COVID-19 ha representado una grave inestabilidad en el sistema de salud por los bajos insumos para atender a los pacientes en situación crítica. Asimismo, el alto costo de tapabocas, alcohol, antibacterial, medicamentos y demás productos para su prevención y tratamiento, hace que sean inaccesibles para gran parte de la población.
El derecho a la salud incluye la obligación de los Estados en garantizar que todos los bienes para la prevención de la enfermedad estén disponibles y sean asequibles.
La presencia del coronavirus (Covid-19) representa para Venezuela una alerta en el sistema de salud, aumento del riesgo en el sector alimentario y nutricional de los venezolanos. La cuarenta en todo el territorio nacional es un considerable obstáculo para las personas que dependen de su trabajo diario para alimentarse.
Sorry, the comment form is closed at this time.