02 Jun Daniella Liendo

Daniella Liendo, ejemplo a seguir

Representante estudiantil, cursa el segundo año de Medicina en la escuela Vargas de la Universidad Central de Venezuela y dirige el equipo de primeros auxilios de esa casa de estudios, que surgió al calor de las protestas de 2014 y se retomó durante las que se escenificaron en 2017. En la actualidad, el grupo se mantiene activo prestando atención médica en comunidades vulnerables de Caracas y el interior del país.

“Lo que llevamos es salud. Ahorita que cualquier consulta en un hospital te puede durar más de tres meses y en privado no todas las personas tienen la capacidad. Entonces lo que tratamos es de solucionar el problema de la persona, con las donaciones que nos han llegado”, describe.

La vocación por lo social define a Daniella. Conversando con ella aflora su compromiso desinteresado por colaborar con los más necesitados, sobre todo en una situación tan precaria como la que se observa actualmente, con la severa crisis en el acceso a alimentos y medicinas, que hacen mella en la salud de la población.

Inspirada desde pequeña por la generación del 28, una de cuyas figuras fundó el colegio en el que cursó estudios de primaria, Daniella es una joven luchadora, echada pa’ lante, como se diría coloquialmente. En sus ojos brota la alegría, cuando recuerda las distintas jornadas en las que ha participado en Miranda, Portuguesa, Apure y los viajes al interior del país para consolidar las iniciativas de primeros auxilios regionales.

“Ahorita la gente está muy descontenta con los políticos”, sostiene. Por eso la motiva que” la gente vea que también el hecho de hacer política es ayudar a los demás, que no es solamente lo que se está viendo ahorita que es estar dentro de un partido o algo así, sino que la política se trata de eso, el arte de ayudar a los demás y de servir”.

Durante las protestas tuvo la oportunidad de establecer contacto con las partes en conflicto, tanto con manifestantes, como con guardias nacionales, policías e incluso colectivos. Rescata esa comunicación como un elemento positivo que permite, incluso en las diferencias, mantener el respeto.

Con ese país sueña Daniella. “Un país en el que la gente se pueda escuchar y no necesariamente entre en discusión, sino que dentro de escucharse construya, porque definitivamente para poder construir tienes que escuchar al otro. Todos tenemos nuestras ideas y unas son más válidas que las otras y podemos construir cuando estamos interactuando entre nosotros”.

No niega que en algún momento se haya planteado irse del país, pero lo desestimó. Afirma tener un proyecto. “Creo que encontré como mi forma de ser feliz dentro de las dificultades acá y es eso, estar metida en las comunidades, aportando mi granito de arena”. “Nos tocó hacer esto, tenemos que tener responsabilidad también, enfrentar la situación que nos tocó y por eso yo, ahorita, no me quiero ir”, afirma Daniella, quien se muestra convencida en que dentro de todas las dificultades que enfrentamos, es posible construir, como con su ejemplo lo ha demostrado.

Daniella defiende Venezuela.